Microensayo de María García

EL AMOR NO TIENE CAVERNA.

El mito de la caverna es una explicación sobre la situación del ser humano respecto a sus conocimientos. Platón cuenta que existe una caverna en la cual hay unos prisioneros atados y obligados a mirar a la pared de la caverna, detrás de ellos un fuego que hace referencia al sol en el mundo sensible y es el que hace que se vean las sombras en el fondo de la caverna. Para los prisioneros esas sombras son la única realidad que existe.

Actualmente podemos ver este mito reflejado en la homofobia, como hay gente que todavía discriminan, insultan o incluso agreden a personas por ser homosexuales. Un ejemplo de esto fue un pastelero estadounidense que se negó a hacer una tarta de bodas a una pareja gay, ¿acaso no tienen el mismo derecho que una pareja heterosexual? La homofobia crea una visión de la realidad que no es la correcta, es decir, crean las sombras que pensamos que es la realidad y nosotros somos los prisioneros que creemos en esas sombras. Esas personas que crean estas sombras o las transmiten son las que según Platón se creen estar en conocimiento de la verdad pero solo se limitan a mantener engañadas a las personas (prisioneros). Muchas personas no son capaces de ver más allá del amor entre parejas heterosexuales ni cuestionarse que el amor es amor y no hay diferencia entre el amor heterosexual y el homosexual, porque al fin y al cabo son personas que aman a otras personas, que todos tenemos los mismos derechos y somos iguales, y por tanto estas personas que no se cuestionan nada son prisioneras de por vida de esta caverna (la homofobia). Parte de la sociedad, que por suerte cada día son menos, piensan que el único amor correcto es el heterosexual, esto se debe al pensamiento transmitido por ciertas personas que nunca se han cuestionado si esa es la única realidad y solo se han limitado a creerla, por ello hay que salir de esta caverna y darse cuenta que el amor es amor ya sea entre parejas heterosexuales o parejas homosexuales, y saber que la verdadera realidad es que el amor no entiende de género, y que las sombras de parejas heterosexuales no son la única realidad.

 Para ello las personas deben pasan por un largo proceso como el prisionero que sale de la caverna y averigua cual es el verdadero conocimiento, en este caso las personas mediante la educación pueden cuestionarse que amar a una persona de tu mismo sexo no es nada malo ni por ello tengas un problema, en cambio aquellas personas que se dejan influenciar por esa creencia de que amar a alguien de tu mismo sexo es algo malo y no llegan a cuestionarse que no es nada malo que es algo tan normal como amar a alguien del sexo opuesto serán prisioneros eternos y solo verán las sombras proyectadas en la caverna, es decir, parejas heterosexuales.

Como conclusión podemos decir que parte de la sociedad actual, por suerte cada día menos, vive manipulada por esa creencia que lleva a la homofobia y para ellos no hay más realidad que la de esa idea de que lo normal es una pareja heterosexual, viven acomodados a ese pensamiento sin cuestionarse si será erróneo, debido a que es más cómodo vivir en la caverna a salir fuera de ella y recorrer el duro y largo camino hasta llegar a darnos cuenta que la que era nuestra realidad no es tal y existe otra realidad que es que el amor no entiende de sexos y es tan normal un amor entre personas de sexos opuestos como el amor entre personas del mismo sexo.